Las tamizadoras centrífugas Gericke se utilizan en todas las industrias que manipulan polvos no abrasivos (los productos abrasivos pueden dañar las tamizadoras).
Las aplicaciones más comunes se encuentran en la industria alimentaria, para materias primas como harina, azúcar, cacao, almidón, sal, leche en polvo, especias, aromas, etcétera. Sin embargo, las tamizadoras Gericke también se utilizan en las industrias química y cosmética, así como en el sector de transformación de plásticos. También se pueden tamizar productos minerales no abrasivos como carbonatos de calcio, yeso, escayola, masilla y caolín, sin causar daños incluso a altas velocidades de tamizado.
Las tamizadoras de Gericke pueden alcanzar producciones de entre 50 Kg/h y 80 T/h, dependiendo de los productos que se procesen y del tamaño de la malla de cribado, que suele oscilar entre 100 µm y 2 mm.
Dependiendo de la aplicación y del producto que se vaya a procesar, se pueden utilizar distintos tipos de criba: malla de nailon, malla de acero inoxidable, chapa perforada, alambre en cuña, etc.
Además, para cumplir las directivas Atex actuales, todas las tamizadoras de Gericke pueden ofrecerse con la certificación Atex de categoría 1D para interiores de la zona 20.